top of page

Elecciones del desecho.

  • Foto del escritor: César Madcat
    César Madcat
  • 21 mar 2021
  • 5 Min. de lectura

Actualizado: 21 mar 2021

La guerra entre pandillas políticas nuevamente sale a relucir y no precisamente por su brillante proceso. Es difícil distinguir donde comienza la cabeza de un partido y terminan las nalgas del otro. Así es amigos, soy Kid Carlo Magno (diría mi amigo Mau) y hoy hablaremos de las elecciones intermedias para elegir a quien comandará alcaldías y diputaciones de nuestro bello y vapuleado México (y alguno que otro payaso).

En redes sociales hay una guerra sumamente marrana por descalificar a sus adversarios y sus correspondientes partidos rivales. Fake news, interminables ordas de bots, memes y apodos de pésima calidad, inundan los comentarios de cualquier nota "periodística" que ose tratar la vida política de nuestro país en sus renglones.

Comenzando por un presidente que habita entre el amor y el odio. Resalta la falta de análisis real sobre su actuar, la tendencia de alabarlo por su figura "omnipotente" y "mesiánica" y por otro lado, de atacarlo sin argumentos reduciéndolo a "está enfermo de poder". La gran mayoría de sus adeptos y de sus detractores no tiene ni la menor idea de toda la mierda que escriben en redes sociales. Porque si algo caracteriza al internauta promedio Mexicano, es su susceptibilidad de caer en tendencias sin algún tipo de respaldo fehaciente.

Luego tenemos a los partidos políticos y sus discursivas gastadas, desesperadamente tratando de adaptarse a una nueva generación de tecnócratas juveniles. Haciendo el ridículo en plataformas sociales como TikTok o Instagram. Campañas fuertemente dirigidas a los neófitos electores.

Partidos podridos hasta la médula que en su desesperación, buscan alianzas profundamente ofensivas por el cinismo que representa, apuestan todo a la falta de memoria histórica de los Mexicanos. Partidos que sin importar su supuesta posición en el espectro (izquierda, derecha, centro etc) o color institucional, pierden la poca dignidad que tenían (si es que alguna vez la tuvieron) recurren a luchadores, actrices, deportistas, faranduler@s, reinas de belleza y todo aquello que su mayor valía política es ser un influyente conector empático entre lo familiar, la TV y los cargos de poder.

Y no es cosa de unos... todos los partidos están haciendo lo mismo en mayor o menor medida. Y si sus postulados no son bufones del espectáculo, son hampones, criminales y los individuos con la mayor falta de ética que este redactor amateur haya podido ver.

Vámonos por partes. Y miren que lo voy a simplificar un chingo en estos ejemplos:

Movimiento Ciudadano: Su mejor ejemplo... Samuel García. Un Junior hijo de aristócratas norteños que representa a la "white-trash" de México, y al estereotipo despectivo del vaquero fresa, ignorante y clasista, que llama "prietitos" a quienes desprecia y no se cansa de hacer el ridículo en cualquier oportunidad pero, evocando al vergonzoso pero existente ego racista de Nuevo León (Vamos hermanos Regios, son mejor que eso).


PAN: hablemos de Ricardo Anaya con su cruzada de "estoy cansado de tanta pobreza" donde exhibe como moneda de cambio a mortales del tercer mundo como su servidor, como si fuera un documental de la NatGeo mostrando a comunidades aisladas de la civilización y el progreso, o como algo exótico demostrando lo poco que conoce a la sociedad que pretende gobernar en 2024 (por que sí, el muy mamón ya está en campaña). Ya ni les platico de su campaña "Únete al PAN joven" y "En el PAN somos Feministas" con la que se balancean en tendencias que debo decir, me temo puedan llegar a funcionar, no por certeras sino por ignorancia.



MORENA: estos viven de su presidencialismo y, aún así, en su lucha interna, constantemente chocan con los ideales de su exdirigente. Tanto esfuerzo por llevarse la mayor rebanada del pastel en 2018, que descuidaron a quien estaba en sus sillas, algunos decentes, pero la gran mayoría... simple y llana basura. Solo basta echar un vistazo al Estado de México y de como pese a lograr arrebatarle hueso al PRI, siguen maniatados por el crimen y sus alcaldes brillan por su complicidad o ausencia, hasta parecen alumnos del señor del Mazo. Lamentablemente maman de la esperanza de muchas personas y aprovecharán de ello en las venideras elecciones.

PRD: Estos sujetos y sujetas, alguna vez símbolo de la esperanza, ahora son el perfecto ejemplo de que el becerro mama siempre de la teta que más leche da, y lo demás no importa. Contaminado por la peste negra como ratas de un barco Frances en el siglo XIV, que no tarda en hundirse, y sus roedores tripulantes saltarán para contaminar el siguiente barco aferrándose a no dejar morir su negocio. Lideres sindicales (de esos que hacen de todo menos por velar por los derechos de los trabajadores), ex-priistas y viejos lobos de mar que ahora solo buscan sostenerse de la orillita del billete, porque ni la ética ni la empatía por sus semejantes Mexas pasa por la masa encefálica de estos tíos.


PRI: ¿Neta tengo que escribir de estos? Los peores por mucho. Asesinos, narcotraficantes, criminales, engaña bobos y avariciosos de mierda se congregan en este cártel.


Los demás son partidos nacientes, partidos satélites e independientes infumables, negocios del clero, de empresarios y necios. Y los verdaderos posibles aspirantes independientes decentes son ignorados por el INE. Ese instituto que lo único que hace bien, es hacer engorroso ir a sacar tu credencial cuando la pierdes. Porque ¿Quién quiere verdaderos políticos críticos, letrados, con convicción? Cuando es un gran negocio tener a nefastos seres en el poder.


Alguna vez alguien me dijo "En todos los partidos hay gente mala y gente buena" y es verdad. Un año trabajando en la política me bastó para ver que todo es un escenario donde parecen estar unos contra otros pero al final funcionan en una simbiosis que les permite mantenerse en el poder a unos cuantos (Y mira que estuve en una gestión morenista, y sin embargo, trabajé junto a panistas, priistas y demás con años de callo). Mientras que los personajes que genuinamente pretenden generar un cambio, son eliminados, dejados en la sombra o más comúnmente asimilados por un sistema diseñado para robar.

No vine a decirles por quien votar. Eso les corresponde a ustedes. Ni siquiera sé aún por quien voy votar. Pero si algo les puedo decir, es que si votarán a conciencia, investiguen, rasquen al historial de su gallo, no se dejen engañar por lo mismo de siempre.

Me despido diciendo algo que me revuelve la mente en cada gran elección nacional o junta vecinal de mi cuadra... Comencemos a juntarnos los que creemos merecer algo mejor. Organicémonos y comencemos a generar un cambio. Primero como individuos, luego como comunidad, después como nación y finalmente como especie. Aunque nos tome 100 años de soledad, pero si vivo 100 años... 100 años pienso en mandar a chingar a su madre al PRI.


Con amor...Niñita. <3



 
 
 

Commentaires


Formulario de suscripción

  • facebook
  • instagram
  • facebook

©2020 por César Alberto Rosas Armendáriz. Creada con Wix.com

bottom of page